delicatessen
Apenas 22 años han pasado desde que se estrenó esta película francesa que revolucionaría el concepto de la fotografía asociada al color y al género dramático. Delicatessen (Jean-Pierre Jeunet y Marc Caro, 1991) bien podría ser la etiqueta de esta obra del arte cinematográfico. Es el segundo trabajo de Darius Khondji como director de fotografía, después de realizar un año antes La ciudad de los niños perdidos (F. J. Ossang, 1990), donde ya demostraba su enfoque creativo y apuntaba la calidad y aproximación estética de su fotografía a la narrativa dramática cinematográfica.
La cinta supuso un importante reto que requería de una minuciosa estrategia fotográfica para cuidar y "mimar" hasta el más mínimo detalle del amarillento mundo post-apocalíptico, misterioso y violento, del carnicero Clapet; quien asesina y vende como carne a sus propios vecinos. Surrealismo total.
Darius Khondji comentaba así su experiencia en el rodaje:
"Al final del primer día de rodaje de 'Delicatessen' ya habíamos hecho entre diez y veinte planos realmente difíciles y ambiciosos. Jean-Pierre Jeunet y yo estábamos completamente exhaustos y pensamos "¿cómo demonios nos las vamos a arreglar para sobrevivir a este ritmo?" Sabíamos que todavía teníamos dieciséis semanas de cinco días como ése ante nosotros. Después de aquel día, llegaron el segundo día agotador y el tercero. Poco a poco nos la arreglamos para mantener el ritmo y cansarnos menos. Todo fue muy bien durante semanas y semanas. Le cogimos completamente el ritmo. Pero en la sexta o en la séptima semana, de repente, todo el mundo se vino abajo. Todos los miembros del equipo estaban exhaustos. Después de aquel bajón, recobramos la energía."
Crítica por Slant Magazine
Crítica por Variety I
Crítica por Variety II
Ernesto Novelli Rimo es el legendario director de fotografía que inventó el proceso químico ENR arquitecto de la estética visual diferente de Delicatessen, y de la que Darius Khondji tomó muy buena nota. Se conoce como el proceso de blanqueo-bypass ("Procédé sans blanchiment", "Bleach Bypass"), que elimina los tonos azules de las imágenes y realza el amarillo y el marrón; impregnando la acción de la película con un aura sanguíneo, para recrear con la iluminación, la atmósfera caníbal de la trama.
Con ello, se consigue una fotografía de alto contraste que parece dar la impresión del filtro blanco y negro sobre una imagen de color. Khondji lo logró mediante la exposición de diferentes gelatinas, cálidas o frías, sobre el negativo, adecuando el esquema cromático de la imagen a las escenas, sus pulsos y su intención dramática. Prima la imagen cálida saturada de amarillos y rojos, si bien es cierto que encontramos imágenes frías en las escenas relativas a Aurora (la mujer que quiere suicidarse por las voces que escucha en su cabeza) y a Rufus (maniático encerrado con sus ranas y caracoles).
Otra cuestión aparte son las lentes empleadas en Delicatessen, donde numerosos planos medios y primeros planos son realizados con lente gran angular: aumentando el surrealismo de la historia, reduciendo notablemente la profundidad de campo y distorsionando a los personajes. Darius Khondji comentó los problemas de tener que rodar con objetivos de corto alcance: "Rodamos prácticamente toda la película con un objetivo cooke de 25 mm, lo cual suponía todo un reto. Nuestra focal larga era una de 32 mm para los primeros planos, que sigue siendo un objetivo de ángulo bastante amplio. Jean-Pierre y yo descubrimos enseguida por qué nos estaba llevando tanto tiempo iluminar incluso insertos con una óptica de 25 mm, ya que el ángulo de la toma posterior al inserto podría abarcar toda una habitación. En el formato 1,85:1 aún hay la suficiente profundidad de campo como para calcular el nivel de luz de la habitación, y Caro, y especialmente Jean-Pierre querían esa profundidad de campo."
La iluminación de Delicatessen es por tanto, de clave tonal alta porque la luz principal es intensa y dominante, aunque altamente contrastada que diferencia claramente áreas, texturas y detalles. Es una iluminación que genera contrastes en el nivel micro de la película y en su nivel macro, haciendo que el género de la película y el argumento choquen bruscamente con la fotografía y alcance fielmente su objetivo.
Crítica de El Antepenúltimo Mohicano
Artículo de Art of the Title
Con ello, se consigue una fotografía de alto contraste que parece dar la impresión del filtro blanco y negro sobre una imagen de color. Khondji lo logró mediante la exposición de diferentes gelatinas, cálidas o frías, sobre el negativo, adecuando el esquema cromático de la imagen a las escenas, sus pulsos y su intención dramática. Prima la imagen cálida saturada de amarillos y rojos, si bien es cierto que encontramos imágenes frías en las escenas relativas a Aurora (la mujer que quiere suicidarse por las voces que escucha en su cabeza) y a Rufus (maniático encerrado con sus ranas y caracoles).
Otra cuestión aparte son las lentes empleadas en Delicatessen, donde numerosos planos medios y primeros planos son realizados con lente gran angular: aumentando el surrealismo de la historia, reduciendo notablemente la profundidad de campo y distorsionando a los personajes. Darius Khondji comentó los problemas de tener que rodar con objetivos de corto alcance: "Rodamos prácticamente toda la película con un objetivo cooke de 25 mm, lo cual suponía todo un reto. Nuestra focal larga era una de 32 mm para los primeros planos, que sigue siendo un objetivo de ángulo bastante amplio. Jean-Pierre y yo descubrimos enseguida por qué nos estaba llevando tanto tiempo iluminar incluso insertos con una óptica de 25 mm, ya que el ángulo de la toma posterior al inserto podría abarcar toda una habitación. En el formato 1,85:1 aún hay la suficiente profundidad de campo como para calcular el nivel de luz de la habitación, y Caro, y especialmente Jean-Pierre querían esa profundidad de campo."
La iluminación de Delicatessen es por tanto, de clave tonal alta porque la luz principal es intensa y dominante, aunque altamente contrastada que diferencia claramente áreas, texturas y detalles. Es una iluminación que genera contrastes en el nivel micro de la película y en su nivel macro, haciendo que el género de la película y el argumento choquen bruscamente con la fotografía y alcance fielmente su objetivo.
Crítica de El Antepenúltimo Mohicano
Artículo de Art of the Title